Cremas árabes. Manjares exquisitos.
La comida árabe es una mezcla de características, texturas y sabores que deleitan el paladar y proporcionan atractivas sensaciones gustativas. En general, se trata de una cocina equilibrada, con predominio de los elementos naturales y numerosas alternativas.
Las cremas figuran entre sus preferencias y suelen emplearse como complementos o aperitivos que se degustan con pan de pita, falafel, tabaquitos y otros platos. Habitualmente, existen recetas fáciles de preparar, cuya elaboración no quita demasiado tiempo y que, posteriormente, se conservan en perfecto estado en la nevera, por lo que suele compensar su elaboración.
Los imprescindibles de la comida árabe
Posiblemente, el humus es una de las recetas de cremas más populares de Oriente Medio. Se sirve como acompañamiento o aperitivo y, básicamente, consiste en un puré de garbanzos mezclado con zumo de limón. Su origen se remonta al antiguo Egipto, por lo que se consume desde hace 7000 años. Uno de los trucos esenciales para la preparación de esta receta es añadir dos o tres cucharadas de tahini. En algunos casos, incluye también carne picada y piñones fritos.
Otras cremas árabes imprescindibles en una comida oriental es la de berenjenas o Baba Ganoush, la Tabule, la crema de pimientos y nueces o Muhammara, y la ya mencionada tahini. Para preparar esta última, solo necesitas combinar 200 gramos de semillas de sésamo crudas y 50 gramos de aceite. Tuesta el sésamo en una sartén grande hasta que tome color y desprenda su aroma típico. A continuación, mientras todavía están calientes, licua esas semillas para extraer su aceite natural. Obtendrás una crema densa a la que debes añadir un poco de aceite antes de mezclar y lograr una masa homogénea, la cual debes introducir en un frasco de vidrio tapado dentro del frigorífico. Y ya está, contarás con una deliciosa crema árabe que podrás incorporar a cualquier menú, a la hora de comer o de cenar.
Otra comida árabe espectacular es la crema de ajo, cuya preparación también es muy sencilla. Basta con combinar 3 dientes de ajo, una pizca de sal, el zumo de medio limón grande, una taza de aceite y, opcionalmente, una cucharadita de semillas de ajonjoli. Lo vas añadiendo y aplastando hasta conseguir una masa suntuosa y consistente, parecida a la mayonesa, y al final le añade el ajonjoli para conferirle una textura más característica.
Características de la Cremas Árabes
En líneas generales, la versatilidad de estas cremas es enorme. Lo mismo pueden convertirse en un entrante agradable, diferente y saludable, que se incluyen como acompañamiento de pinchos de carne, falafel o pollo cocinado.
Sus especiales características hacen de las cremas árabes una opción todoterreno: perfectas en las cenas temáticas sobre Oriente Medio, pero también fácilmente integrables en cualquier comida de diario. Si no se te da bien la cocina, careces de tiempo o, simplemente, deseas facilitarte la vida, puedes pedir que te lleven a casa comida árabe desde Just Eat, la web de comida a domicilio en la que podrás encontrar los mejores restaurantes de tu ciudad.
En definitiva, las cremas árabes son delicias fáciles de preparar, que combinan muy bien y pueden integrarse como primero o segundo plato. Además, dado que están elaboradas con productos procedentes de la naturaleza, son muy saludables y resultan deliciosas.
